El Networking es un camino de personas. Tener éxito en el Networking tiene que ver con agregar valor a la vida de otros generosamente, muchas veces en caminos tortuosos.
El gran desafío de las relaciones tiene que ver con entender cómo funciona el ser humano y estar listo para cuando se susciten los problemas. Usted debe tener claro que se va a equivocar, es solo cuestión de tiempo. Debe estar preparado y por eso hemos escrito este artículo para ayudarle a tener un plan de contingencia para cuando suceda.

¿Qué es reponer un daño y por qué en el Networking es importante?

Se considera como un daño todo conflicto, desacuerdo o comportamiento que de una u otra manera lesione o ponga en juego una relación en el campo profesional.

REPONER UN DAÑO es la acción que tomamos posterior al mismo para que la relación pueda retomarse. El ser humano es bastante más complejo que el estado de resultados de una empresa o de los criterios lógicos de administración. El corazón, las heridas y el perdón son variables intangibles imposibles de cuantificar o expresar en términos económicos y que si aprendemos a entender honradamente, conseguiremos reparar los potenciales daños que sin duda en algún momento de su carrera profesional tendrá.

Hemos diseñado un modelo de reposición de daños Share que compartiremos a continuación para su Plan de Networking.

Lo primero a tomar en cuenta es que la anticipación es la clave al momento en un potencial conflicto. La mejor pelea es en realidad la que se evita. El arte de la guerra se basa en ganar sin pelear. Pero si a pesar de la anticipación la contraparte no ayuda o el conflicto simplemente sucede entonces la siguiente estructura es la clave:

  • ANÁLISIS DEL CASO: Uno de los retos más difíciles del mundo profesional es poder analizar un problema con cabeza fría. Pero debe hacerse. Aléjese del ruido del conflicto, tómese un respiro y analice objetivamente el problema. No podemos reponer aquello que con exactitud no logramos detectar. Es clave identificar cuál fue exactamente el daño causado y en donde tuvo su impacto en la otra persona.

En su proceso de identificar el daño podrá tomar como punto de partida el canal por el cuál identifica el daño, aquello determinará precisión de su entendimiento. Este canal puede ser:

Manifestado: Es decir, con exactitud a través de una conversación u otro medio de comunicación la parte afectada le dice qué fue lo que le molestó y qué daño causó su error.

Asumido: Es el daño al que llegamos a través de nuestras propias conclusiones y análisis de lo ocurrido. También en este análisis podemos tomar opiniones y comentarios de terceros (involucrados en el daño o nuestro círculo de confianza). Lo hacemos de esta forma cuando la otra parte no desea comunicarse con nosotros o cuando se dice “que la relación esta bien” pero los comportamientos no demuestran lo mismo. Tenga cuidado con asumir en falso, aunque esta es una opción válida cuando la otra parte no manifiesta con claridad el tema, es importante también evitar suponer equivocadamente.

 

¿Qué tipo de daño es? ¿Cuál fue el impacto del mismo?

Recuerde que todos tenemos una manera de ver y percibir la realidad, e incluso de interpretarla y entenderla. Prepárese para que las diferencias entre su análisis y el de la otra parte no se conviertan en un impedimento para llegar a las soluciones. No se trata de quién tiene la razón sino de su habilidad por distinguir con precisión los intereses del otro y trabajar un plan enfocado en satisfacer esos intereses sin contraponer los suyos. Y lo más importante, usted NO va a poder jamás palear un daño y construir soluciones o retomar una relación si es que existe falta de perdón o lesiones importantes en lo emocional, material o espiritual.

Como último paso para definir con la mayor exactitud el daño causado vamos a preguntarnos, analizar o en ocasiones escuchar a la otra parte, (Cuando el daño es manifestado) si la responsabilidad recae solo en usted o también en el otro. Si ambas partes son responsables y la otra parte lo reconoce magnífico, las soluciones fluirán. Pero si no hubiere reconocimiento en la otra parte entonces usted tendrá que evaluar si continuar o no con esa relación comercialmente hablando le conviene. Y aunque la respuesta sea no, jamás deje la herida abierta. Aunque usted se retire repare los daños. Recuerde que el perdón no necesariamente significa reconciliación. Una persona, aunque no siga siendo comercialmente su cliente o proveedor, será una muy mala recomendación o referencia suya en el mercado si usted deja abiertas heridas en la relación. Cabe recalcar que retirarse como un caballero o dama siempre debe ser la prioridad.

 

  • ACEPTE LAS PÉRDIDAS: Uno de los procesos más complejos cuando existen estas situaciones, usualmente muy emocionales, es que la aceptación de las pérdidas se dificulta. Reconocer el problema es más fácil que aceptar cuando las consecuencias son por ejemplo económicas o reputacionales. A continuación, te compartimos una serie de preguntas que puedes hacerte para aceptar el aprendizaje al cometer un daño:
  • ¿Cuál fue el daño causado?
  • ¿Qué tipo de daño es?
  • ¿Cómo pude haber evitado el daño? Escribir todas las opciones que tenía.
  • ¿Qué medidas tomaré para que no vuelva a ocurrir?
  • ¿De qué forma le daré seguimiento a mis medidas?

 

Es a partir de las preguntas donde llegaremos a respuestas y decisiones más claras que podrán evitar lo ocurrido nuevamente.

    • LISTADO DE REPOSICIÓN: Una vez que hemos detectado el daño causado o al menos a través de un análisis damos con una aproximación del mismo, el siguiente paso es crear un listado de formas, vías, acciones con las que podremos reponer los daños causados.

Si el canal del daño fue directo con el afectado y manifestado por el mismo, podemos por medio de ese mismo canal preguntarle de qué forma podemos reponer el daño causado.

Si el afectado le dice con exactitud de qué forma reponer el daño, tome apuntes y asegúrese de que en el proceso de reposición se genere una expectativa mayor a la que esperaba, indicando que se apena por lo sucedido y que considera poco la forma en la que puede reparar lo sucedido y que si estuviera en sus manos hacer algo más lo intentaría. Dar un poco de más, mostrará su generosidad y provocará un sentimiento de reciprocidad.

En caso de que el canal directo no conteste (puede ser debido a la aversión que generamos por el daño) haremos el listado basado en el análisis inicial sobre el daño causado asumido.

Es decir: Si detectamos a través de nuestro análisis e investigación que el daño es económico con un impacto de pérdida de $1.000 y la pérdida de un proveedor estrategico, a pesar de que de forma directa el afectado no nos haya dicho aquello. Nosotros apuntaremos nuestro listado de formas de reposición, que en este caso podría ser, por ejemplo: Devolver las pérdidas, favorecer a la persona con algún recurso de su interés con el que usted cuente, etc. Procure posteriormente decidir y priorizar aquellas acciones que considere serían más efectivas.

Contar con este listado de reposición de daños priorizado, nos abrirá el camino hacía una ejecución más ordenada.

  • EJECUCIÓN Y SEGUIMIENTO: Una vez que tenemos identificado el daño causado, hemos aceptado las perdidas, y tenemos un listado de reposición; llega el momento de reponer y dar seguimiento a la nueva solidez de la relación.

Disminuya el Tiempo de Reposición. – El tiempo y la forma en la que reponga el daño es clave. Hacerlo muy rápido podría provocar una reacción de ventaja en la contra parte y hacerlo muy lento podría cerrar la puerta a una reparación. El tiempo exacto deberá ser calculado con su buena intuición reconociendo en la otra parte su capacidad en tiempos de reparación, cada persona tiene un termómetro distinto. Busque además el momento y la forma propicia. Recuerde que no queremos que usted pierda dignidad o su vulnerabilidad se convierta en debilidad. Queremos lograr reparar la relación no que la persona se aproveche de usted o que la reparación le genere costos y esfuerzo y no tenga el resultado deseado.

En el proceso que ejecutamos las acciones de reposición de daños se debe dar seguimiento a las reacciones que la misma genere. Ya que, si la acción es la correcta, las emociones, el trato, las oportunidades volverán a ser como lo era antes. Pero si no es como antes, podemos darnos la oportunidad de ejecutar otra acción de nuestro listado.

Cuando el canal directo nos dice como reponer el daño, la efectividad de la reposición aumenta, cuando la reposición es en base a nuestro análisis e investigación, podríamos tanto acertar como no tener un impacto tan sólido en la reposición, es ahí cuando podemos continuar con otras opciones de nuestro listado, o tomar la iniciativa de expresar nuestro malestar al afectado y pedirle a el que nos diga opciones de como remediarlo.

Si el afectado en la ejecución de nuestro plan de reposición de daño decide no escucharnos o no aceptar nuestras acciones de restaurar quedará en nuestras manos decidir si dejar perder la relación o en un futuro seguir intentando.

  • CUMPLIMIENTO SERIAL: En el momento que logramos realizar una reposición de daños exitosa en el que la parte afectada se encuentra tranquila, no perjudicada y en ocasiones agradecida con nosotros por nuestra responsabilidad, es justo ahí en donde podemos hacer sólida la imagen que realmente queremos proyectar a través de una campaña sólida de cumplimiento. Una campaña de cumplimiento se refiere a que tendremos especial cuidado en efectuar todos los acuerdos que tengamos con quién era nuestro afectado, le demostraremos constantemente con acciones que lo anterior tan solo fue un pequeño tropiezo. Aquello reforzará positivamente nuestros valores.

Aplicar estos pasos para la reposición de daños nos ayudará a no perder una relación que en un futuro se reflejará en oportunidades para ambas partes.